Tampoco hay garantía de que al gastar miles de dólares en marketing crecerá a tu negocio. Si pierdes el tiempo buscando atajos, encontrarás uno que te deje sin una empresa.

Aunque no haya una serie de reglas que te hagan triunfar, en mis 40 años como emprendedor he recolectado algunas guías que pueden ser muy buenas.

1. Crea un producto o servicio útil.

Lo más importante es que no debes entrar a un negocio por razones financieras. Tener una compañía involucra pasar muchas horas ahí y tomar decisiones complicadas y si sólo tienes como motivador el dinero, tu empresa probablemente fracasará como muchas otras.

Es importante crear algo útil que vaya a beneficiar a la sociedad. Si haces algo que realmente te importa, estarás en una mejor posición para encontrar clientes, conectarte con ellos y hacer que regresen. Una vez que has decidido qué tipo de producto o servicio te interesa, enfócate en cómo hacer las cosas diferentes a la competencia: investiga y encuentra un nicho para poder innovar y posicionar tu marca.

2. Simplifica tu mensaje.

Los clientes no sólo compran por la marca y sus productos, también les importan los valores de la empresa. Pregúntate ¿Por qué inicié mi negocio? Sé honesto, esto te ayudará a establecer un valor auténtico. 

Luego convierte tu mensaje en algo más sencillo. En Virgin, nos preocupa el servicio al cliente, valor y alternativas innovadoras. Lo más importante es que vemos el negocio como una fuerza para hacer el bien. Sabiendo quiénes somos y lo que defendemos, asegurará que no perdamos tiempo o dinero en un mensaje que no nos representa frente a los clientes.

3. Véndete.

El marketing es una herramienta poderosa, pero no tiene que ser caro. Mi mentor, Sir Freddie Laker, un hombre que fundó una empresa para retar a British Airways en su propia casa, me dio un consejo invaluable cuando comencé con Virgin Atlantic Airways.

Sabiendo que no podíamos igualar a las demás aerolíneas en cuanto a presupuesto de marketing, me motivó a hacer la publicidad yo mismo “Úsate a ti mismo, haz el ridículo. De otra forma no sobrevivirás”. Tomé su consejo y pensé en formas en las que podía resaltar de entre la multitud. Fue entonces cuando llamé la atención de los medios rompiendo records mundiales y haciendo diversas bromas.

Aunque siempre he estado interesado en los deportes y retos físicos, esa tal vez no sea la ruta para ti. Encuentra tu método, conoce tu marca, haz las cosas a tu manera y crea olas. La publicidad gratis llegará sola.

4. Usa las redes sociales.

Herramientas como Twitter y Facebook son muy buenas formas para dar a conocer tu mensaje a la audiencia. Las redes sociales no son sólo una forma de hacer una publicidad menos costosa, sino que son grandes oportunidades para un compromiso innovador con sus clientes. Úsalo a tu ventaja.

Recuerda, hay una gran diferencia entre vender y marketing. En mi experiencia, vender un producto a través de las redes sociales no funciona, es mejor comunicarte con tus clientes de una forma divertida y auténtica. La retroalimentación que recibirás en las redes sociales puede ser invaluable, especialmente cuando tu negocio está comenzando.

Escucha los comentarios de tus clientes sobre las ofertas de tu empresa para entender qué haces bien o mal. También puedes usar sus opiniones para mejorar tus campañas sociales y medir la efectividad de tus acciones.

5. Sigue haciendo lo que te gusta.

Si realmente amas y crees en lo que haces, otros se darán cuenta y compartirán tu entusiasmo. Si tu interés está en vender ropa, es tiempo de hacer un cambio, expándete a nuevos territorios, cualquier cosa que te interese. Para encontrar el éxito, necesitas estar realmente comprometido o tu trabajo lo reflejará.

Fuente: www.soyentrepreneur.com / Por Richard Branson