El fascinante mundo de los sueños

Cada noche nos trae universos insólitos, personajes misteriosos o episodios que no podríamos vivir despiertos.

Cuando soñamos estamos abriendo una puerta de la mente donde residen elementos de nuestra mente primitiva y constituyen una vía de acceso a realidades que están más allá del alcance de la lógica.

Los sueños son únicos, por lo que concretan su propia realidad. Además, unifican cuerpo, mente y espíritu.

Un poco de historia

Los sueños han sido considerados desde la antigüedad como una forma de contacto con la divinidad y de vaticinar eventos futuros. Y es que en épocas remotas, los sueños eran vistos como un canal de comunicación con los dioses, quienes enviaban mensajes sobre algún tema en específico.

Esto ocurrió con la cultura babilónica y hebrea. De igual manera, los griegos, concebían a los sueños como herramientas para presagiar el futuro. Para otras culturas orientales, como la india, los sueños siempre han sido observados como herramientas para perfeccionar el alma.

Por su parte, los monjes tibetanos y otras culturas chamánicas hicieron uso de la capacidad humana de penetrar en forma consciente en el mundo onírico, realizando así toda clase de ejercicios espirituales.

¿Por qué soñamos?

Estudios científicos sugieren que la capacidad de soñar es una sofisticación del sistema nervioso de los mamíferos. Los sueños serían un descanso mejorado o aprovechado que tienen relación con la simulación de situaciones para potenciar la adaptación y consolidad la memoria, así como también otras actividades cerebrales.

Cuando se duerme, se pasa por dos grandes etapas. Primero ocurre la fase NREM o Sueño Sin Movimientos Oculares Rápidos, con la cual comenzamos a dormir y a descansar.

De manera posterior, se pasa a la fase REM o Sueño con Movimientos Oculares Rápidos. Es en esta fase donde se producen los sueños. Se cree, asimismo, que los sueños o la fase en donde se producen los sueños, sirven para regenerar el tejido cerebral, desgastado por el uso diario.

Interpretación de los sueños

En primer lugar, es de suma importancia tener en cuenta las emociones que has tenido durante el sueño. Cualquier sueño que nos produzca, por ejemplo, una angustia terrible, delatará la tensión nerviosa que vivimos a diario, aunque nos parezca que el sueño es imposible de interpretar coherentemente.

Si nos vemos en una calle o en cualquier lugar concurrido, donde nos cruzamos con otras personas que no nos miran y nos sentimos aislados, esto será un claro reflejo de alguna situación que hayamos o estemos pasando actualmente y en la que nos sentimos desamparados.

Existen sueños comunes, como el de volar o caer, que expresan emociones básicas de todos los seres humanos, como la necesidad de libertad o el miedo a perder una posición

Para Freud, cada sueño podría ser interpretado, para lo que es necesario desglosarlo en partes que deben ser estudiadas por separado, con el fin de llegar a una interpretación final que permita descubrir el mensaje que nuestra mente nos quiere hacer llegar.

Para reconocer el significado, es necesario saber los "antecedentes" de la persona. Por esta misma razón, la mejor interpretación la puede dar el mismo soñante. Pero debes saber que el diccionario de símbolos en los sueños es sólo una guía para desarrollar esta labor.

Fuente: www.feminis.com