El uso de las Tecnologías de Información (TI's) se ha convertido en un componente central para aumentar la competitividad de las pequeñas y medianas empresas (Pymes) en México. Tanto en el plano de producción, como en el escenario administrativo, el uso inteligente de la tecnología ha demostrado ser una valiosa herramienta que puede ayudar a reducir costos, aumentar la productividad, mejorar los flujos de información y detonar la competitividad.
Los grandes corporativos lo saben, pero son precisamente las empresas medianas y pequeñas quienes tienen importantes áreas de oportunidad, considerando que sólo 3 de cada 10 Pymes tienen una base tecnológica instalada.
En este contexto, vale la pena conocer las opciones para subirse al mundo de las TI's, donde el leasing o arrendamiento ofrece atractivas ventajas sobre la compra de equipo. A continuación le decimos por qué.
Inversión inteligente
La máxima para invertir en TI, es hacerlo a partir de un objetivo de negocio, como puede ser la búsqueda de nuevos mercados o la introducción de nuevas líneas de negocio.
Para ello, se recomienda hacer un diagnóstico de cómo se encuentra la empresa, hacia dónde quiere ir y las herramientas con las que cuenta, considerando mejorar primero en los procesos internos (aquellos que son clave para la operación del negocio) y, posteriormente, en los que tienen un impacto hacia el exterior, (por ejemplo, los involucran a clientes y proveedores).
Acto seguido, hay que analizar las opciones: Comprar equipo y soluciones o arrendar.
Con la primera alternativa, si bien usted será dueño del equipo, debe considerar la rápida obsolescencia del mismo y la descapitalización en la que tendrá que incurrir.
“Con el arrendamiento hay más margen de opción en materia logística, técnica y hasta fiscal”, comentó Ubaldo López, director de ventas para Latinoamérica de Hewlett Packard Financial Services.
Advirtió que esta opción permite al empresario destinar su flujo de caja y las líneas de crédito disponibles a las actividades cotidianas de su empresa, al tiempo que puede disponer y renovar la tecnología de una forma más eficiente.
Y es que con el leasing, no es necesario un desembolso de dinero inicial que pudiera limitar sus líneas de crédito existentes, ya que sirve como un recurso de crédito adicional, dice el ejecutivo.
Además, permite renovar de manera periódica la base tecnológica instalada a partir de pagos mensuales, amén de posibles beneficios contables y fiscales.
“Lamentablemente, no todas las Pymes están en este canal”, indicó Alberto Mora, director de IBM Global Financial quien aseveró que se tiene que perderle amor a los activos.
“A las antiguas Pymes les gustaba tener equipo, pero hay que ver que a largo será un problema, porque necesito cambiarlo y eso significa un costo adicional”, advirtió.
Otro punto importante en relación a las Pymes, es la importancia de presentar un correcto estado financiero, pues de éste y de su historial crediticia depende, en gran medida, que se concrete el arrendamiento.
Puntos clave
¿Te atrae la opción del leasing? ¡Adelante! Pero antes considera que hay 2 tipos de arrendamiento: el puro y el financiero. En el primer caso, el equipo es propiedad de la arrendadora y el empresario sólo debe pagar una renta por el periodo previamente establecido. El pago, entra en el rubro de gastos debido a que es considerado una renta.
Por su parte, el arrendamiento financiero, implica beneficios fiscales para el cliente, aunque el equipo sea de la arrendadora. También contempla la opción de compra al final del contrato.
Un punto adicional que no debe pasar por alto, es la contratación del proveedor. Pon atención en la reputación de la empresa, si es posible consulta su cartera de clientes, chec las sanciones por cancelación anticipada, las opciones de renovación y/o adquisición del equipo al final del contrato y no te olvides de revisar a detalle las letras chiquitas del mismo.
“Hay que asegurarse de que el contrato no tenga costos ocultos, como ciertas comisiones, porque al final se puede salir de control”, agregó Alberto Mora, de IBM.
Al margen de la opción que elijas, analiza tus motivos para invertir y, sobre todo, despeja todas tus dudas en cuanto al contrato, cláusulas especiales por cancelación anticipada, servicio, etcétera.
Recuerda que, después de todo, la inversión en TI es parte integral de tu negocio y, como tal, debe redituarte beneficios.
Opciones a la vista
Hewlett Packard
Cuenta con atractivas opciones de leasing para Pymes, que contemplan plazos de entre 24 y 48 meses, con mensualidades fijas. Al término del contrato, el cliente tiene la opción de adquirir el equipo, extender su uso, retornarlo o renovarlo.
La base mínima de operación es a partir de de 25,000 dólares. Entre otros requisitos, se requiere ser persona moral, tener tres años de operación y presentar estados financieros.
Más información en: www.hp.com/hpfinancialservices/mx/default.html
IBM
Express Financing es la oferta de financiamiento de IBM Global Financing México. Ofrece soluciones financiada en un 100%, incluyendo hardware, software y servicios. Cuenta con plazos de 24 a 60 meses, con pagos en dólares o pesos. Al término del contrato, existe la opción de devolución, compra, extensión o cancelación del equipo.
Más información en: www-304.ibm.com/businesscenter/smb/es/es/
Dell
Ofrece arrendamiento en las modalidades puro y financiero, con planes en dólares o pesos mexicanos y plazos de 12 a 36 meses. Uno de sus productos es el Plan Easy Lease, a partir de 500 dólares y hasta 40 1,000 dólares. Su Plan Leasing requiere la asistencia de un ejecutivo para evaluar los montos de rentas. Puede solicitar más información vía correo electrónico en
Más información en: www1.la.dell.com/content/topics/reftopic.aspx/gen/es/bsd/payment?c=mx&cs=mxbsdt1&l=es&s=bsd&~section=0
Compra inteligente
Antes de invertir en TI haga es importante evaluar varios aspectos, para lo cual vale la pena preguntarse:
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¿Qué me mueve a invertir en TI, moda o necesidad?
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¿Qué objetivos quiero alcanzar?
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¿En cuánto tiempo?
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¿Qué resultados he obtenido con la base tecnológica actual?
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¿Qué puedo rescatar, qué necesito renovar?
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¿Qué áreas o procesos necesitan mayor impulso y por qué?
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¿Qué áreas y procesos de la empresa estarán involucradas?
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¿Qué recursos técnicos, humanos y económicos necesitaré?
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¿Cuánto presupuesto tengo para invertir? No olvide considerar el presupuesto de implantación y mantenimiento.
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¿Qué implicaciones a nivel cultura organizacional puede tener la renovación tecnológica?
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¿Cómo podré manejarlas?
Fuente: www.mundoejecutivo.com.mx / (Empresas y Empresarios / Por Érika Uribe)
Publicado por: TuDecides.com.mx
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