(CNNexpansion) Si usted piensa que se recupera con los boletos de cine, se equivoca: 60 de cada 100 centavos van para el exhibidor. Por ello, los productores recurren a múltiples “ventanas”, como video-renta y video-venta, proyección en aviones, pago por evento, televisión de paga, televisión abierta y distribución en otros países. Claro que en un año de crisis, abrir esas ventanas se complica.
Nuevos mercados y diferentes géneros. Por un lado, Amor, dolor y viceversa se puede vender en Latinoamérica (aparecen la uruguaya Bárbara Mori y el argentino Leonardo Sbaraglia). Por el otro, la productora está apostando a un abanico temático. En 2010 estrenará una comedia (El soldado Pérez) y una de ciencia ficción (La última muerte). Sus proyectos incluyen un musical y una cinta sobre el terremoto de 1985.
Pablo Cruz, fundador de Canana (productora de Sólo quiero caminar) propone:
Estrenos simultáneos. “Canana ya tiene su propia distribuidora, aunque nos apoyamos en Videocine para los grandes estrenos. También contemplamos que nuestras películas tengan su estreno simultáneo en DVD, televisión de paga y cine”.
Los costos de una productora
Presentamos el costo de siete cintas mexicanas de reciente producción y un breve análisis de cómo va la recuperación de su inversión:
Matando cabos (2005)
Costo: 35 mdp
Estatus: Acaba de renovar los derechos para televisión. Ya está en números negros.
Kilómetro 31 (2007)
Costo: 30 mdp
Estatus: Recaudó en taquilla 118 millones de pesos
Sultanes del sur (2007)
Costo: 24 mdp
Estatus: Falta que recupe la inversión, pues aún no llega a televisión abierta.
Navidad S.A. (2008)
Costo: 36 mdp
Estatus: Está “tablas”, pero aún se puede explotar más merchandising (juegos de mesa etc.)
Amor, dolor y viceversa (2009)
Costo: 18 mdp
Estatus: Por ser coproducción española, Lemon Films invirtió una suma menor a la acostumbrada
El Soldado Pérez (2010)
Costo: 55 mdp
Estatus: Necesita recaudar 100 mdp en taquilla para ser un producción rentable
Dos visiones ante la crisis
Los dos productores hablan en torno a la dificultad de producir cine en México en época de crisis. Uno se muestra optimista; el otro pesimista:
La optimista
Fernando Rovzar, fundador de Lemon Films; productor de Amor, dolor y viceversa.
¿Es posible hacer varias películas al año?
Nos gustaría hacer 10, pero tenemos capacidad para dos, y las hacemos de distintos géneros para que otros nos superen, en taquilla o en calidad. El crecimiento de esta industria depende de ‘subir la barra’ para el cine mexicano.
¿Cómo ven la llegada de 500 mdp de estímulo fiscal al cine?
Los productores tenemos una gran responsabilidad. Mi único miedo es que al tener acceso a ese dinero se filmen guiones medioterminados y que la gente diga: “Gracias por reafirmarme que el cine mexicano no está listo para mi dinero”.
La pesimista
Pablo Cruz, fundador de Canana; productor de Sólo quiero caminar
¿Qué tan difícil es levantar un proyecto?
“En las condiciones actuales trabajamos por amor al arte. Debemos ser muy conscientes de algo: si la película no tiene esperanzas comerciales, debe ser muy buena para viajar a muchos festivales. Si será un taquillazo, desde un inicio debe buscarse cómo colocarla.
¿Es complicado recuperar la inversión?
Es casi imposible. El exhibidor ha saboteado el mercado y es el enemigo; el 65% de recaudación de taquilla que se queda es un insulto. Además, el mercado de video no existe gracias a la piratería, y las televisoras no compran películas mexicanas al precio que deberían.
Fuente: CNNexpansion / Por Edgar Apanco/Alto Nivel, edición impresa
Publicado por: TuDecides.com.mx
Edición: Adrián Soltero
Contacto: dir@tudecides.com.mx
Nota: Por lo general todos los artículos cuentan con fuente y autor del mismo. Si por alguna razón no se encuentra, lo hemos omitido por error o fue escrito por la redacción de TuDecides.com.mx.