Industria automotriz ¿por dónde transitamos?

La fría realidad es que en el mercado interno, el comercio de autos nuevos luce pálido frente a una oferta que ha sido bastante regular, pues prácticamente todas las marcas importantes ya operan en el país y ofrecen un conjunto de más de 400 versiones en sus modelos.
 
¿Indiferencia?
Es evidente que los altos impuestos cuando se adquiere un vehículo del año (entre 22% y 40% del valor total) son un factor de desaliento para el comprador promedio, quien ha volteado desde hace un par de años a los automotores importados de segunda mano, debido principalmente al bajo precio en que se ofertan en los tianguis o lotes del tipo. ¿Cuántos mercados de autos no florecen en el Distrito Federal y distintas partes del país, hasta el grado de que muchos de ellos operan en la vía pública, sin permiso alguno?
 
La situación no parece aliviarse con el anuncio del Impuesto Empresarial a Tasa Única (IETU), que ha llevado a distintas empresas a posponer la renovación de sus flotillas en tanto no comprendan bien cómo las afectará dicho gravamen.
 
Todavía en febrero reinaba la incertidumbre, pues AMIA no reportó ningún cambio al respecto, cuando hasta se abrigaba la esperanza de un repunte en ventas una vez disipadas las dudas sobre la nueva carga fiscal.
 
A ello hay que sumar el aumento paulatino a la gasolina y la disposición que obliga a compradores de autos 2008 a equiparlos con un sistema de rastreo vía satélite (por cuenta de él mismo) más su respectiva renta.
 
Por si fuera poco, la recesión económica de Estados Unidos (producto de la cartera vencida en sus créditos inmobiliarios) seguramente provocará un ajuste de precios en diversos insumos, como el acero. Aun así, antes de dejar el cargo a Eduardo Solís, el presidente saliente de AMIA, César Flores, se mostró optimista al asegurar que esta alza no será significativa y que cada armadora contempla estrategias adecuadas para enfrentarla, como la compra de un volumen alto de materiales o el uso específico de otros, como el alumnio (aunque éste insumo resulta más caro).
 
Diagnóstico alentador
El panorama no es alentador, sobre todo si se toma en serio el pronunciamiento que hiciera el mismo Flores Esquivel en torno a que, de no regularse adecuadamente la importación de autos usados, las armadoras en el país tendrán una caída de hasta 40% en sus ventas. Y si lo asegura es por conocimiento de causa, pues en su reporte de resultados de 2007, AMIA informó que las transacciones internas se fueron abajo en un 3.5%, esto es, cayera a niveles de 2004.
 
El punto de equilibrio de estas cifras ha sido el volumen de vehículos exportados, que creció en 5% respecto de 2006, aunque se había pronosticado un 10%.
 
Según los especialistas del sector, la industria nacional ha mostrado desde hace tres años números muy pobres en ventas internas y medianos resultados de producción y exportación. Su recomendación para no rezagarse en las estadísticas del panorama internacional es que se cree una eficiente red de proveedores y sistemas de alta calidad y servicio que incluyan un competitivo soporte mécanico y de refacciones.
 
Al respecto, Flores propone un acercamiento más estrecho con el gobierno federal e insistir en una adecuada regulación a la importación de autos usados, pues el decreto sobre el particular (de agosto 2005) ha sido calificado por AMIA como light.
 
También es necesario motivar la obligatoriedad de un seguro e impulsar la oferta de los subcompactos, que en términos generales representan el mayor número de ventas en volumen en México y es uno de los segmentos más estancados. Revisar a fondo todos los motivos es la tarea primordial antes de que nuestra industria se vea rebasada por el alud de importaciones de autos usados, además de los altos impuestos.
 
Detroit se pone verde
 
José Antonio Durán
 
Vehículos con tecnología híbrida, que consumen menos gasolina o que usan combustibles alternativos, como la electricidad o el hidrógeno, fueron las estrellas que acapararon los reflectores del Autoshow
 
Detroit, EU. El uso de combustibles alternativos ya es un hecho: ésa fue la consigna con la que concluyó la reciente edición del Salón Internacional del Automóvil de Norteamérica (NAIAS, por sus siglas en inglés), celebrado en Detroit. Decenas de miles de visitantes tuvieron mucho que contemplar en esta importante pasarela del automovilismo mundial, aunque en esta ocasión los prototipos eléctricos, biodiesel, híbridos y de autos a diesel acapararon la atención.
 
Un ejemplo es la SUV Cadillac Escalade Two Mode Hybrid, de General Motors, que le saca un mayor beneficio al motor eléctrico, pues lo mismo se puede manejar en la ciudad que en carretera. Esta tecnología es nueva y se diferencia claramente del resto, puesto que los híbridos que circulan actualmente solamente aprovechan su motor eléctrico en las calles citadinas.
 
El Saturn Vue Green Line Plug-in Hybrid, que funciona con electricidad mediante una carga en casa de cuatro horas y una autonomía de ocho horas; y el Provoq, que opera con el sistema E-Flex, que genera electricidad a partir del hidrógeno, también impresionaron a más de uno por su innovación y prestaciones.
 
Respecto de estos vehículos, Rick Wagoner, presidente de General Motors Corporation, reiteró su compromiso por seguir desarrollando motores que trabajen con otro tipo de combustibles. “Ello dependerá también de las necesidades de los consumidores, de las políticas de cada país y de los volúmenes en la demanda en cada mercado, pero seguramente el siguiente paso en la industria será experimentar con el uso del etanol (alcohol etílico)”, comentó el directivo.
 
Y es que el futuro ya nos alcanzó, pues si algo destacó en la pasarela de este Autoshow fueron los argumentos y nuevos modelos por parte de los fabricantes de todo el mundo,
para demostrar su preocupación por la ecología y por la eficiencia en el aprovechamiento de los recursos renovables y no renovables.
 
Por citar, la marca de camionetas todo terreno Hummer rompió el molde al crear otro tipo de vehículos más allá del H2 y H3. En este salón puso en la pasarela el modelo HX, un todoterreno compacto de dos puertas, con el que seguramente competirá de manera directa con los Jeep de Chrysler.
 
En contraofensiva, esta firma presentó la camioneta Chrysler EcoVoyager, la cual es propulsada por un motor eléctrico, complementado con células de combustible. Pero el concepto con el que más deslumbró a la audiencia fue Dodge ZEO, un crossover deportivo de 2+2 plazas, que denota el agresivo diseño de la marca del carnero al exhibir una nueva apariencia de lo que podrían ser los autos deportivos del siglo XXI.
 
El Dodge ZEO tiene un motor eléctrico con baterías de ion de litio, con las cuales será capaz de recorrer 400 kilómetros, sin emitir contaminantes.
 
La firma sueca Saab exhibió la camioneta 9-4X Bioethanol, de 4 cilindros y 300 caballos de potencia. Aunque este modelo sólo se presentó como un concepto, la realidad es que ya está en su fase final para producción en serie. De hecho, se presume que se fabricará en México y, por tanto, se convertirá en el primer automóvil de la marca que se producirá fuera de su país de origen.
 
¿Y los japoneses? Era obvio que no podían quedarse atrás. Toyota mostró la pick up compacta, denominada A-Bat en su versión híbrida, y Honda impresionó con su vehículo ecológico FCX, equipado con una nueva pila de combustible, 20% más pequeña y 30% más ligera que la anterior generación, y el modelo concepto CR-Z, un coupé impulsado por un motor gas-eléctrico bajo un sistema híbrido.
 
De igual forma, Mitsubishi puso a consideración el concepto RA, que es una variación del modelo Evo X, con estructura de aluminio y un motor turbo-diesel.
 
En resumen, mucho se ha especulado sobre el uso de combustibles alternativos, pero si algo demostró el Autoshow de Detroit es que prácticamente todos los fabricantes ya rivalizan con propuestas innovadoras y prototipos, con tal de demostrar su compromiso con el desarrollo de una industria más limpia... y rentable.

fuente: alto nivel.com.mx