Ideas de regalos que harán que tus clientes siempre estén pensando en ti

Esta es una de las métricas más importantes que tener en cuenta, además de ser una métrica que nunca pasa de moda. Es la razón por la que Coca-Cola está por encima de Pepsi cuando piensas en refrescos de cola, y por la que Kleenex es la única marca que se te ocurre cuando piensas en pañuelos desechables. También es la razón por la que la gente toma tantísimo café de Starbucks, incluso si hay una cafetería local de mejor calidad a un lado.

Ser el primero en el que piensen sí es importante, y si puedes lograrlo, necesitas mantenerte en ese lugar.

Más allá de crear productos o servicios de calidad, una de las formas más sencillas de volverte referencia en tu categoría es con un regalo. Cumpleaños, navidad, san Valentín o incluso un logro o el inicio de una nueva etapa para ti o para tu cliente, son excelentes excusas para enviar un regalo. Lo interesante es que no debe tratarse de algo impersonal o irrelevante, no puedes confiar en cualquier cosa y ponerle tu nombre.

Esto podría dañarte, así que debes ponerle atención a lo que mandas y lo que esto refleja sobre ti.

No necesitas presumir

En esto, el dinero no tiene nada que ver. No necesitas gastar miles de pesos para inclinar la báscula a tu favor. La botella más cara de champaña no te servirá de nada si la persona que la recibe no toma champaña y termina regalándola. Estamos hablando de tus clientes, tus socios, tus futuros clientes. Deberías conocer a estas personas a un nivel más profundo, y el regalo que les envíes debería demostrarlo.

Lo genérico no es bueno

No seas ese emprendedor que envía una pluma, una taza, o una memoria USB con el logo de tu empresa. Esto no sirve de nada y terminará en la basura. Y lo que es peor, estos regalos tienden a percibirse como vulgares, disminuyendo el valor de tu marca.

El objetivo es ser memorable

Ser memorable significa que estás en la mente de tus clientes, socios y prospectos en cuanto vean tu regalo. Y que estarán pensando positivamente sobre ti. Para lograrlo, el regalo tiene que ser original y considerado. ¿Qué tipo de personas son? ¿Qué les gusta hacer? ¿Qué hacen cuando no están trabajando? ¿Qué necesitarían en su trabajo que les facilitara la vida? ¿Qué los haría decir ‘wow, se esforzaron’?

Tal vez son súper intensos en el gym, pero sabes que en Navidad se dan un permiso de vez en cuando… Entonces unos chocolates de calidad que sean 80% cacao serán muy bien recibidos y valorados.
O tal vez son personas aventureras que disfrutan de la naturaleza, y una planta para su oficina pudiera ser un regalo memorable que los haga sonreír.

Si sabes que beben whiskey, entonces esmérate con una buena botella. O si sabes que les gusta correr, a la mejor unos audífonos inalámbricos, o si aman el café, un termo con una leyenda divertida que refleje su personalidad y la calidad de tu relación.

Cuando logras que tus clientes piensen frecuentemente en ti, aunque sea de manera pasiva, se sentirán más inclinados a buscarte cuando lo necesiten. Si es algo con lo que puedas ayudarlos, ¡bien! Tendrás más trabajo. Si es algo que has visto antes pero no puedes resolver, entonces puede ser tu oportunidad para lucirte con una buena recomendación, lo que te hará parecer mucho más profesional a sus ojos y hará que piensen mejor de ti.

Y si eres muy bueno en lo que haces, entonces el hecho de que se acuerden de ti les beneficia a ellos también. Si eres el mejor, tienes la responsabilidad de ser memorable para que cada vez que necesiten algo, se acuerden del mejor. Y la forma más sencilla de hacerlo es con un regalo bien pensado.

Fuente: entrepreneur.com   / Por: Steve Eakin